Después de una confortable ducha te preparas para pasar un formidable día. Lo primero, abre la ventana de tu habitación. Observa: cielo, gallinas, flores, silencio, aire de verdad, luz de la buena, un burrito, silencio, gorrinos, silencio, unos pájaros a lo lejos, otros más cercanos, silencio, olores olvidados...
¡Esto si es una buena programación y no la de la tele!

Ahora el desayuno. De los de antes. Sin dietas (o sí), sin prisas. Después… un ratito de reposo mientras haces los planes para el día. La finca está situada en la provincia de Badajoz, en Valverde de Leganés a unos 400 km de Madrid. Paradójicamente esta dehesa extremeña, tierra de descubridores, está por descubrir.

Entre olivos y encinas frente a la Sierra de Alor; entre pueblos llenos de historia, dólmenes y caminos reales. Para que no te falte de nada. Además podrás disfrutar de auténticas delicias para el paladar porque ésta es tierra de extraordinarios quesos y excelentes productos ibéricos.
Suena bien ¿verdad?

En fin, programa el día como mejor te venga. A lo mejor lo que te apetece es darte un paseo hasta Elvas y comprarte unas toallas, o dejarte querer por los buenos mesoneros de la zona. O tal vez, lo tuyo es recorrer en bici los preciosos lugares que nos rodean, o ir andando... o no. O dormir o... lo que sea. Hay quien disfruta haciendo fotos. De ese tema, precisamente, podrás hablar con el anfitrión, Michael, largo y tendido ya que en su haber tiene más de treinta y cinco años trabajando como fotógrafo para toda la industria, la publicidad y la moda. Ahora, que si prefieres hablar de otros temas interesantes, Lu (la anfitriona), sabe lo suyo sobre siatsu, y cocinando hay pocos que la superen.

El pequeño John, dada su corta edad, aún no tiene grandes experiencias pero si quieres puede iniciarte con su “árbol secreto”... Oye, que gustos hay para todo. Podría ocurrir que echaras de menos el ajetreo, pues hay tienes Olivenza, Mérida o Zafra, Badajoz, Trujillo y Cáceres a tiro de piedra. O para los menos perezosos del coche, Lisboa a 2h. Ya para concluir el día, John, Michael y Lu te acompañarán en una exquisita cena con postre y tertulia cerca de la chimenea si es invierno, o en el porche si es verano. ¿mola?